lunes, 11 de octubre de 2010

"Fin de análisis en los tiempos de la infancia"

Alba Flesler
(*)Reunión Lacanoamericana de Psicoanálisis. Brasil, Bahía; 1997.

Quisiera comenzar haciendo ocasión de una pregunta para introducir mi tema, hoy. Ella no es sin embargo, una pregunta ocasional. Por el contrario, pareciera ser insistente y legítimamente formulada por todos aquellos psicoanalistas que atienden niños, púberes y adolescentes. He aquí la pregunta:
¿Cuál es el fin del análisis de niños y de adolescentes?
Para precisar la cuestión del fin diferenciaré aquello que el fin implica como finalidad, de lo que conlleva como conclusión. El abordaje de la segunda acepción, requiere a mi entender una puntualización de la primera, que definiendo la finalidad de un psicoanálisis, permita decidir su alcance y por ende delimitar el tiempo de su finalización.

Por lo antedicho desbrozaré el título propuesto en :

- Finalidad del análisis, en los tiempos de la infancia.
- Los tiempos de la infancia.
- El fin del análisis en esos tiempos.

LA FINALIDAD DEL ANÁLISIS EN LOS TIEMPOS DE LA INFANCIA.

¿Cuál ha de ser la finalidad de la intervención analítica en los tiempos de la infancia? Los tiempos de la infancia son especialmente ilustrativos de la estructura de lo humano, pues muestran una estructura cuyo anudamiento va produciendo su dimensión de incompletud, en tiempos. Tiempos que he llamado en otra oportunidad, de escritura. De escriturar la falta(1). Tiempos de escritura de la estructura, tanto del sujeto que en ella se efectúa y reefectúa, como del objeto causa de deseo que en ella se engendra y se reengendra; como del Otro que en ella se produce y reproduce ofreciendo sus formaciones.
Las instancias del tiempo a que me refiero son las de lo real del tiempo, de lo simbólico y de lo imaginario donde cada tiempo de la infancia sólo hallará causa para su promoción a uno siguiente en la recreación escritural de la falta original. Dicha recreación, duelo mediante, (2) ofrece como resultado variaciones de presentación, tanto en la posición del sujeto como en la localización del objeto que orientará su deseo. Pues en cada tiempo se puntualiza una redistribución en el goce, reorientando el deseo.
Desde esa primera instancia en el deseo del Otro, donde el niño halla su primera morada (dit - mansion) (3) hasta el alojamiento para su deseo en el marco fantasmático cuyo broche es resultado de la metamorfosis de la pubertad; la escena de la infancia se realizará recorriendo varias vicisitudes. Pero el destino de las mismas, lejos de desplegarse en un continuum se recorta en discontinuidades, de las cuales quisiera destacar los momentos decisivos de su tránsito, con la intención de resaltar la especificidad del acto analítico acentuando su finalidad de corte. La eficacia de su operación ha de promover que se reanude cada uno de estos tiempos, donde su curso se halle interrumpido, procurando vías al sujeto para relanzar su efectuación.

TIEMPOS DE LA INFANCIA.

¿Cuáles son los tiempos de la infancia? ¿En qué posición se halla el sujeto, el objeto y el Otro en los tiempos de la infancia?
Un primer despertar sexual, despertó al sujeto de un sueño: ser el falo que completa a Otro. El despertar cuya significación metapsicológica es recortada con precisión por Freud (4) reformula la relación del sujeto al goce, poniéndolo de cara nuevamente con su prematuración esencial.
Esta instancia del tiempo permite reconocer un instante de la mirada. Ver la castración en la madre, dice Freud, confronta al sujeto con el primer gran conflicto que el binarismo significante le presenta: ser el falo o tener el falo. De alta densidad imaginaria ambos suponen una pérdida simbólica, pues si lo es no lo tiene y si lo tiene no lo es.
La legitimidad que otorga espacio al avance fálico es solidaria de la prohibición del incesto que priva al Otro de gozar al niño como su falo y traza el perfil del objeto como falta, traspasando de esta manera el dualismo niño-madre fálica. El descubrimiento produce sin embargo eficacia para la construcción fantasmática si la falta que el niño ve es una falta localizada (5), soportada en alguna letra que brinde significación al sujeto más allá del goce materno.
Un niño de 7 años con una notoria inhibición en su avance fálico evidente en su amaneramiento y conductas femeninas, soñaba pesadillezcamente y a repetición, que encontrándose plácidamente recostado en un bosque con lagos, veía aparecer súbitamente a su madre. Con horror, descubría que ella era un esqueleto, él la arrojaba a las aguas despertando sobresaltado.
Este niño no podía siquiera jugar a "ser varón", ni en la escena analítica. Idéntico a sí mismo el significante no cumplía su lógica esencial de funcionar haciendo juego, rebajado a la categoría de signo dejaba detenida la movilidad de la escena lúdica. (6)
Si por el contrario, la represión opera dando vía a la sustitución, se iniciará un tiempo para comprender, de predominio simbólico. El tránsito de un tiempo a otro se realizará en un pasaje que irá desde el encuentro con lo nuevo, real propio del despertar, con el desajuste que desata, a su asimilación a la estructura en un proceso de delimitación de ese real.
La sucesión propia de este tiempo llamada latencia, lejos de suspender la sexualidad, late en un tiempo altamente simbólico donde se juegan las reglas que pautan o regulan la relación al goce. Pues es la legalidad del tiempo anterior asentado en la prohibición paterna del incesto, que promoviendo la regulación del goce para el sujeto fuera de la madre, da entrada a la latencia, donde la sexualidad permanecerá latiendo. Lejos de ser, de esta manera, un tiempo suspendido a la improductividad de la espera, se sostiene de un proceso de reescritura de la represión en el que se dialectizan el saber y la falta de saber, promoviendo una ganancia, el aprendizaje de la lectoescritura que es solidaria en sus vicisitudes de la eficacia o falla de la operación precedente.(7)
Inhibiciones, síntomas y angustias de este tiempo son reveladores de los goces que estancados en el cuerpo impiden la curiosidad necesaria que guía la búsqueda del saber en el proceso de aprendizaje.
En su transcurso cambia el juego y la escena lúdica cede paso al ensueño donde la escena halla su despliegue en un cambio de punto de vista. El niño que antes no ocultaba sus juegos ahora se ve jugando en la escena que ya su vergüenza le impide revelar. (8)
Tanto en la escena del juego como en la del ensueño, se entrama el destiempo en que se efectúa la subjetivación de lo real.
Será la pubertad por su parte, el momento de concluir. Momento precipitante de la estructura, la adolescencia se caracterizará por la búsqueda del objeto en la alteridad (9), por la identificación a los ideales de su sexo (el S halla su trazo en el Ideal), es decir la definición de la identidad sexual y el desasimiento de la autoridad paternal, si la ley ha funcionado. Sus efectos se leerán en el nudo del cuerpo: en el cuerpo real pulsional, en el cuerpo imaginario del narcisismo y en el cuerpo simbólico del lenguaje. Sus avatares entraman la relación con los otros, el grupo de pares y la pertenencia a él, con lo que la misma conlleva de salida a la exogamia. También la relación a la autoridad, es decir, la vertiente de la ley para el Otro.
Las presentaciones de su transcurrir ponen de manifiesto este predominio de lo real, tanto en la urgencia con que el sujeto busca respuestas como en la puesta en escena, actings, de aquello que escapa a la palabra dejando al sujeto expuesto por la ausencia del límite en lo simbólico ante la presencia del límite real. (el pasaje al acto). (10)

EL FIN DEL ANÁLISIS.

El psicoanálisis que fue creado para el tratamiento de neuróticos adultos y para ellos pensó su dispositivo no resulta extensible sin más, a los tiempos de la infancia.
Esto no impide sin embargo considerar su abordaje desde el psicoanálisis.
Atendiendo a lo incumplido de la constitución es posible psicoanalizarlos sin desconocer que aún no ha precipitado su fantasma definitivo. Esto decide en la intervención del analista la prisa por procurar al sujeto la conformación fantasmática para el sostén de su deseo apresurando en esta puntualidad, el fin. Fin que difiere entonces notablemente del de un adulto.
El sujeto, el objeto y el Otro no tienen edad pero sí tienen tiempos por eso no hay analistas de niños, ni de adolescentes pero sí hay especificidad del acto analítico. Diferentes intervenciones según los tiempos de escritura del sujeto y del Otro en la estructura.
En esto se diferencia analizar a un niño o a un adulto. El carácter temporal y espacial plantea distinciones en el terreno del acto analítico que requieren establecer las condiciones posibles para su realización.
Especificidad de una clínica que reconocedora de los tiempos del sujeto, lejos de acomodarlo al contexto habitual ubica en el centro de la eficacia del acto analítico al sujeto e interviene descoagulando cualquier sentido que detenga su efectuación. El oficio del analista se halla en oficiar este viraje.
A diferencia del análisis de un neurótico adulto en que se trata de atravesar el fantasma, en los tiempos de la infancia se intentará propender a constituir un fantasma que sostenga el deseo y permita una regulación de las relaciones del sujeto con el goce. Niños, púberes o adolescentes tienden a plantear una despedida del análisis cuando sienten que por la vía del fantasma sostienen su deseo y que alcanzan en cierta medida una posible realización del mismo.
Para concluir, quisiera cerrar este texto abriendo junto a una nueva pregunta, una apuesta.
La eficacia del análisis de niños; ¿Su alcance está referido sólo a la descristalización de un goce o el encuentro con un analista deja alguna impronta distintiva en la estructura?
Mi experiencia de recibir adolescentes o adultos que pasaron por un análisis en la infancia, me hace presumir una posición del sujeto diferente tanto en relación al saber como a la falta.
Sus ganancias más evidentes son el apronte del sujeto al análisis y una diferente articulación del saber a la verdad.
La fobia a los colectivos había desplegado en el análisis los significantes reorientadores de un espacio para el sujeto. Pasando por el hecho de decir que; en los colectivos no quería ir porque allí "estaban unos sobre otros", entonces "no se sabía quién era quién" y también circunscribir que cuando iba en el auto de papá temía que un colectivo se le viniera "encima", al mismo tiempo que su mamá mientras manejaba el papá, cerraba los ojos y la tomaba fuertemente de la mano.
Al lograr cerrar la puerta de su cuarto, cuando habitualmente sus padres dejaban todas las puertas abiertas, llegó un tiempo de conclusión donde ya no tenía miedos. Con aire canchero, hizo este dibujo de una pareja teniendo relaciones sexuales en una carpa donde dibuja al hombre arriba, la mujer abajo con las piernas- puerta cerrada; dibujo de despedida y se fue.
Diez años después me consulta con angustia manifestando una franca insatisfacción en su relación amorosa con un varón, pues le ocurre reiteradamente que el entusiasmo del comienzo rápidamente se pierde, cuando el muchacho "se le viene abajo".
El soltarse del cuerpo materno se operó en los tiempos de la infancia (11) por la vía de una identificación histérica que hoy reclama una nueva redistribución de goce. El sujeto se halla disponible para reescribir su escisión disponiendo del recurso que la pregunta le brinda para interrogar el saber en lo atinente a la verdad.

NOTAS:

(1) Los tiempos de escritura de la falta en su relación al trabajo de duelo son retomados del texto "El Duelo de los Niños". Cuadernos Sigmund Freud Nº 19 de la EFBA.
(2) Ídem.
(3) En las clases del 19-12-72 y 9-1-73 en su Seminario XX, Lacan hace un juego homofónico y ortográfico entre dimension (dimensión) y dit-mansion (dicho - mansión) refiriéndose a la cuestión de la función del lenguaje y a la articulación diferencial entre lo escrito y el significante.
(4) La puntualidad del "despertar" y sus efectos de conmoción imaginaria, son distinguibles en la metapsicología freudiana del "estar despierto" como recuperación de la representación del mundo.
(5) La eficacia que conlleva la localización de la falta para la orientación del deseo ha sido desarrollada en las clases del Seminario "Alcances y Límites de los Análisis: Tiempos posibles de escritura", dictado junto a Analía Meghdessian en 1994. Publicación: Fichas de la EFBA.
(6) La vertiente del juego y su función es retomada del texto "Jugar de niños", publicado en Cuadernos Sigmund Freud Nº 17 de la EFBA.
(7) En el texto precedente se menciona un recorte clínico que puntúa la cuestión del aprendizaje de la escritura y su relación al cuerpo.
(8) En "El creador literario y el fantaseo" Freud sitúa los momentos de pasaje de una escena a otra .
(9)La redistribución en el goce que reclama la adolescencia ha sido tratado extensamente por Silvia Amigo en su libro "De la Práctica Analítica, Escrituras". Ricardo Vergara, Ediciones.
(10) Para abordar la cuestión de lo real en la clínica es sumamente esclarecedor el libro de Isidoro Vegh: "Las intervenciones del analista" de Acme Agalma Editorial.
(11) Los tiempos de la infancia hacen contrapunto con el tiempo de "lo infantil", producto de la conclusión de los anteriores. Esta diferencia es, a veces confusa en la producción freudiana.

viernes, 6 de agosto de 2010

La perversión y el incesto

CAPACETE, LAURA ADRIANA

Filiación Institucional: Docente de Posgrado. Fac. de Psicología. Univ. de Bs. As.


Resumen: El trabajo desarrolla la posible estructura perversa de los hombres que incestúan a sus hijos o hijas. Dicho diagnóstico no se deriva de la realización del acto, sino del discurso, del fantasma, y del singular lazo que entablan con la víctima –signado por la destitución subjetiva-. Las inferencias se realizan a partir de los enunciados que constan en causas judiciales tramitadas en la Pcia. de Bs. As., Argentina.

Palabras clave: perversión-incesto paterno filial



El concepto de perversión es complejo, y como plantea Roudinesco (Nuestro lado oscuro, una historia de los perversos, Ed. Anagrama, Barcelona, 2009) desde su aparición en la Edad Media, ha variado epocalmente la designación de dichos sujetos. En el siglo XX, dicha definición quedó bajo la órbita del saber médico, fundamentalmente del discurso psiquiátrico, para finalmente ser eliminada dicha categoría del DSM a fines de ese siglo (1987).

En este trabajo retomo dicha categoría, para mostrar la predominancia de esta estructura en los padres que incestúan a sus hijos o hijas. Dicha inferencia la realizo a partir del discurso y del particular lazo que entablan con las víctimas, y no meramente por la realización del acto abusivo, en tanto considero que este puede darse –como plantea Serge Andre ([1999] “La significación de la paidofilia”, conferencia en Lausanne del 8.6.99. Publicación periódica orientada al tratamiento de la violencia, Año 1, enero 2002)– en cualquier estructura clínica.

En el tema que nos ocupa, de la bibliografía actual que aborda la temática de los abusadores de niños, surgen dos grandes paradigmas: por un lado quienes apuntan a una clasificación según la elección de objeto (Es frecuente en la bibliografía encontrar la siguiente clasificación de los abusadores: abusador paidofilico y abusador regresivo. Consideran que los primeros son típicamente perversos porque su orientación se dirige solo a niños, mientras los segundos “regresan” a estadios evolutivos propios. Dicha clasificación es mencionada por Golberg (1984); Sanz, Molina (1999); Perrone, Nanini (1997). Criterio similar es el planteado por el DSM IV, donde la paidofilia ( F54.) designa individuos que sienten atracción por niños menores de 13 años) –abusador paidofilico o abusador regresivo–; por otro quienes ligan la problemática a la identidad masculina y al ejercicio asimétrico del poder. El primer paradigma de tipo descriptivo deriva del esfuerzo clasificatorio propio de la ciencia positivista del siglo XIX, donde las perversiones aludían a elecciones de objeto no naturales; el segundo de tipo explicativo, está fuertemente influenciado por las corrientes feministas que visibilizaron la problemática del abuso sexual en la segunda mitad del s. XX, y tienden a pensarla como un modo de abuso de poder, práctica propia de una sociedad patriarcal.

El material desde el cual realizo las inferencias son causas judiciales, las cuales presentan como fuente de información beneficios y limitaciones. Entre los primeros permiten el acceso a una problemática que no es frecuente encontrar en la clínica -en este ámbito si hallamos niños o adultos que han sido abusados-, pero rara vez encontramos a un sujeto abusador en la consulta. Sí son denunciados en los Juzgados, instancia de Ley que es demandada para acotar el goce. La limitación de las causas judiciales como fuente, es suministrar información recortada, fragmentos de discurso, relatos de hechos –la Justicia busca pruebas–, y fundamentalmente no partir del dispositivo analítico donde la transferencia pueda jugarse. Sin embargo, la información encontrada presenta recurrencias, fundamentalmente en las escenas, en el vínculo entre el abusador y el niño, que permiten plantear ciertas líneas teóricas, así como abrir muchos interrogantes. Puntualicemos algunos aspectos de la estructura perversa, para articularlos con la casuística .

Primero digamos que en esta estructura no se está fuera de la Ley, sino se intenta encarnar una ley particular, cuyo texto no escrito promulga la obligación de gozar. El perverso no es un trasgresor, un mero cuestionador de ciertas convenciones sociales, para quien no está prohibido obtener placer, sino alguien que instaura otra ley, por cierto más tiránica en tanto pone al otro a su merced. Esto en tanto se sitúa en a, es decir en posición de objeto –y no de sujeto– del fantasma. Se sabe instrumento o voz de una voluntad de goce absoluto de la Ley natural, que equivale para Sade en un sustituto de la Ley moral kantiana; desde ahí se dirige a la víctima, en quien ha dejado todo el peso de la subjetividad, quedando ésta profundamente dividida entre la sumisión a la voz imperativa y la rebelión contra el dolor, hasta que se desvanece. Por lo cual no suscita deseo, sino angustia.

Este particular posicionamiento frente a la Ley, puede observarse en estos padres. En lo fenoménico del funcionamiento familiar suelen ejercer un poder autoritario, controlando despóticamente los movimientos del grupo. Pero dicho rasgo, no está asociado a hacer cumplir severamente las leyes o normas culturales, sino intentan encarnar ellos una Ley, por cierto paradojal.

A modo de ejemplo, pueden citarse los siguientes casos:

- Un padre obliga a su hija a mantener relaciones sexuales, fundamentando: “tenes que hacer esto porque así lo hacen todos los padres con sus hijas”.

- Un padrastro interactúa en la cotidianeidad con su familia permanentemente armado, amenazando con un revolver si inmediatamente no se aceptan sus órdenes. Durante varios años violaba a sus dos hijastras púberes, al ser interrogado en sede policial, declara desafiante “me las cojía porque me gustaban, son mías, yo les di el apellido”.

Vemos aquí que la nominación genealógica, supone para este padre el acceso carnal, dictando una regla que borra la prohibición de la ley fundante de la cultura.

En segundo lugar, estos hombres mantienen una posición de certidumbre respecto al saber.

Veamos esta cuestión, si el neurótico presenta siempre un enigma; el perverso por el contrario no se hace pregunta alguna en tanto tiene cierta certidumbre sobre su goce. Pretende tener un saber que se presenta como verdad, lo cual dificulta la constitución de la transferencia, por esto rara vez consulte a un analista. En este mismo sentido, Braunstein (El Goce. Un concepto lacaniano, Bs. As.: Siglo XXI, 2006) plantea que el perverso sabe sobre el goce –propio y ajeno-, y desde allí predica un evangelio, en el que afirma sus derechos. En la voluntad de goce, el único problema será como procurarse los medios para asegurárselo. Seduce así con el fantasma de saber-gozar, es decir sabe que hacer con el otro, para obtener su complicidad o su terror, sabe como hacer operativo su fantasma.

Retomando lo anterior, si el neurótico formula una pregunta al otro para tener un lugar en su deseo, por el contrario el perverso se constituye él mismo como respuesta, la cual impone de modo categórico. Para esto necesita un partenaire que experimente la división subjetiva, el otro deberá llegar al borde del desvanecimiento por la escenificación atroz. Ese partenaire no debe ser complaciente, sino resistente y suplicante, para él ser dueño de la situación.

Veamos algunos ejemplos:

- Una niña de doce años declara “el venía a la noche y me molestaba, me decía que no tenga miedo, que me iba a enseñar una cosa que solamente el me la podía enseñar. Yo le decía que no quería aprender nada, que se fuera, pero siempre a la madrugada quería enseñarme. A los dos meses me dijo que no le importaba si quería aprender o no, que me lo iba a enseñar igual y me violó”.

- Una joven de trece años era violada por el padre desde los once, dos o tres veces por semana, mientras le explicaba “hago esto para que te acostumbres, para cuando tengas relaciones con otros chicos”.

En tercer lugar opera con la lógica de la desmentida que, si bien no es exclusiva de la estructura perversa, lo presenta –dice S. Andre (1999)– como un argumentador temible, sobre todo cuando es inteligente, en tanto tiene una retórica muy apta para manipular el valor de verdad del discurso en función de tener siempre razón. Cuestión esta observable en las causas judiciales, donde tienden a argumentar, por ejemplo, que son víctimas de una manipulación materna, lo cual lleva a algunos jueces a negar la ocurrencia del incesto aduciendo, por ejemplo “Sindrome de alineación parental”.

Asimismo, circulan teorías –perversas– que consideran que condenar la elección sexual a niños, es propio de una sociedad moralista y conservadora (hacen una analogía con la discriminación a los homosexuales). Teoría ésta que circula en revistas de paidofilicos, que se han agrupado internacionalmente, y de la que algunos abusadores se hacen eco en sus defensas.

En cuarto lugar, analicemos la cuestión del fantasma, sabemos que todo fantasma es perverso, dado que el escenario imaginario del neurótico conjuga deseo y goce. Por lo cual la diferencia no estará en el contenido del fantasma, sino en su lógica y singular uso. En el neurótico el fantasma es su tesoro secreto –esencialmente privado–, y aunque también puede realizar ciertos actos que impliquen lazos perversos, nunca llega a la coordinación del deseo con la voluntad de goce. Por el contrario en el perverso el fantasma solo adquiere sentido cuando se hace público, se sirve de éste para una puesta en acto que incluya a otro (con o sin su consentimiento) como participe de su escenario. Esto en lo manifiesto aparece como seducción o manipulación, en tanto necesita que el fantasma tenga una función demostrativa.

Braunstein (El Goce, un concepto lacaniano, Bs. As.: Siglo XXI, 2006) plantea que el neurótico goza sin saberlo, disfraza su goce con los atuendos del síntoma, su no saber lo desgarra y lo hace sujeto de análisis. El goce aparece como escenificación fantasmática de difícil confesión. Dicho autor plantea que cuando el neurótico se aventura al campo de la perversión, da la impresión de apuntar más al remordimiento ulterior que al goce presente. Por el contrario el perverso no suele vacilar frente a la actuación, ni responsabilizarse, a posteriori, por su acto. La lectura de las causas judiciales nos evocaba escenas de tortura -que no cesaban-, aún luego de formulada la denuncia jurídica. En algunos casos porque el incesto seguía ocurriendo, en otros porque excluidos del hogar, se hacían ver o escuchar en forma amenazante por las víctimas. Por ejemplo, un padre le decía a su hija incestuada que en caso de ella hablar, él iría a la cárcel, pero al salir la mataría junto a toda su familia.

Es así que la vivencia de terror trasciende la escenificación de las escenas sexuales, y se plasma en otorgar un posicionamiento al otro en el que no puede escapar: queda como un mero objeto, y por tanto destituido subjetivamente.

Un quinto aspecto, relacionado con el usufructo del fantasma, es el montaje de una escena privada, donde se realiza un ritual, casi siempre con características teatrales, donde el sujeto pone en acto la singularidad de su goce. Cabe señalar que el universo subjetivo del perverso, se encuentra siempre desdoblado, y la escena privada coexiste con una escena pública que será el lugar de semblante explícito donde las convenciones sociales son respetadas con enorme celo. Dada la lógica de la desmentida perversa, ambas escenas y discursos, paradójalmente no entran en contradicción.

Dicha escena privada suele tener carácter de suspenso, desarrollarse con suficiente cautela para buscar la complicidad del otro y dejarlo en una angustia ingobernable. Es decir, generalmente la práctica incestuosa no se da como un hecho intempestivo y abrupto –no tiene las características de un acting–, sino que se prepara lentamente, buscando un “consentimiento” que coadyuva a una culpabilidad muy difícil de tramitar en las víctimas.

Veamos un ejemplo: Un padrastro jugaba reiteradamente con su hija pequeña a que le rasque la panza, lentamente le iba diciendo “cada vez más abajo”, y acota “si me tocas el pito no importa, porque yo soy tu padre”.

Para la inclusión en la escena, a veces se busca el asentimiento con una declaración de “amor”, donde se otorga a la hija el lugar de la más amada y se la compara ventajosamente con la madre. Sólo a veces se ejerce violencia física, la escena siempre incluye un pacto de silencio, y amenazas si este se rompe.

Decíamos antes que la escena implica la puesta en acto en un escenario, que involucrará la participación de un tercero. Clauvrel (La pareja perversa, en El deseo y la perversión, Bs. As.: Sudamericana, 1984) plantea que si bien el vínculo que el perverso entabla se funda en un contrato que solo los interesados deben conocer, tanto en sus términos como en su práctica, esto no significa que el tercero esté ausente. El tercero debe estar excluido, pero a la vez presente, en una posición tal que esté necesariamente ciego, que sea impotente o cómplice. Desde aquí se puede pensar la particular participación de las madres u otros familiares en el abuso intrafamiliar: quedan mirando renegatoriamente la escena en impotente y ciega complicidad.

En sexto lugar, estos padres logran la división subjetiva de los hijos víctimas. No buscan simplemente hacer daño, quieren dejar al otro dividido y en una angustia insoportable. Esto probablemente esté asociado a un rasgo que cita recurrentemente la bibliografía sobre los niños abusados: la disociación. Son colocados en una posición imposible de tramitar: si hablan se sienten culpables por dañar a una figura a quien también aman, o aterrorizados porque se pueden cumplir las previas amenazas; si callan , quedan en posición de objeto para la satisfacción de un Otro, meros cuerpos, sin derecho, sin deseo y sin palabras.

Cabe mencionar a Elizabeth, hija encerrada e incestuada durante 24 años por el Ingeniero austriaco, Fritz, quien declara haberse sentido sólo “un pedazo de carne”.

Finalmente, y este aspecto es central, no muestran una posición subjetiva donde el sentimiento de culpa o la responsabilidad por el acto pueda ser enunciado. Y es en este sentido necesaria la sanción jurídica, en función de poner límite a la coacción a repetición, para intentar alguna responsabilización sobre el acto. Sanción jurídica que tendrá también efectos favorables en las víctimas, como plantea Gerez Ambertín (Crimen de abuso, crimen de incesto, en “Culpa, responsabilidad y castigo”, Vol. III, Bs. As.: Letra Viva, 2009, p. 174) “quien recusa el lugar de víctima y lucha por romper el sometimiento al victimario, precisa que el ritual jurídico lo acompañe, otorgándole el respaldo de la ley por su calidad de ciudadano, que denuncia el crimen del incesto”

miércoles, 2 de junio de 2010

Análisis de un caso clínico: Graciela

por la Lic María Cruz Maisonnave

Datos filiatorios

Graciela tiene 32 años. Convive con sus cuatro hijos: Cintia (13), Celeste (8), Ismael (6) y Cristian (4). Desde mayo de 2009 se encuentra separada de su pareja. Actualmente ejerce la prostitución. Es de nacionalidad paraguaya, hace 10 años que vive en la ciudad de Mar del Plata.

Motivo de consulta

Asiste a la admisión derivada por el CAV (Centro de Asistencia a la Víctima), pidiendo ayuda psicológica para su hija mayor y para ella, ya que en mayo de 2009 descubre que su pareja y padre de sus tres hijos menores abusaba de su hija. Desde entonces ni su hija ni ella han tenido contención psicológica y dice estar sobrepasada por la situación. Se le ofrece un espacio para ella y se gestiona con otra de las psicólogas de la sala un espacio para su hija.

Desarrollo

Las dos primeras entrevistas que se mantienen con la paciente se focalizan en la problemática del abuso de su hija. Graciela descubrió hace ya ocho meces que su pareja abusaba de su hija cuando volvió de dejar a sus hijos menores en la escuela y los sorprendió manteniendo relaciones sexuales. Cuenta que en ese momento agarró un cuchillo y “tuve 2 minutos en blanco”; luego se contuvo y realizó la denuncia penal correspondiente en la Comisaría de la Mujer. Si bien su ex pareja tiene restricción de acercamiento él vive en el mismo lote que ella y sus hijos. En dicho lote hay una casa en el fondo donde vive ella y un local en el frente dónde vive él desde que fue descubierto. Graciela dice no aguantar más esta situación ya que entran y salen por el mismo portón y comparten el patio de la casa. Se han sucedido durante el transcurso del tratamiento varios hechos de violencia, desde agresiones verbales que ella reproduce en las entrevistas, hasta agresiones físicas y amenazas con armas blancas por parte de él. “Yo ya estoy cansada” Se trabaja fundamentalmente para que no naturalice la convivencia con su ex pareja y para que siga insistiendo mediante los canales legales correspondientes para que efectivicen la exclusión del hogar y la orden de alejamiento vigentes. Por otro lado Graciela dice cosas tales como “mi hija menor me dijo: yo ya sé que todo esto es porque Cintia anda con papá”, “él lo hizo para vengarse de mi porque cree que yo lo engañé con un vecino”. Cuando este tipo de frases sucede se insiste en que Cintia es menor y que por lo tanto se trata de una relación asimétrica en la que Cintia no “anda con” sino que abusaron de ella.

A partir de la tercera entrevista se puede comenzar a trabajar más desde otra línea. Sucedieron dos hechos que poseen relevancia: la policía sacó a su ex pareja del local; y Graciela comenzó a ejercer la prostitución. Desde esta entrevista Graciela comienza a hacer ciertos despliegues en relación a su trabajo y un vecino con el cual comienza a verse. Cuenta cuanto gana, a qué hombres les gustó, lee los mensajes que este vecino le manda al teléfono, o comenta en tono risueño cosas tales como “el otro día me tentaba de decirle a la otra psicóloga que trabajo de prostituta”. Si bien cambia de lugar de trabajo varias veces cada nuevo lugar se presenta como ideal: “él me cuida mucho, me dice con quien estar y con quien no” dice en relación al dueño de uno de los boliches en los que ha trabajado.

Se intenta indagar sobre su familia de origen, sobre su relación con los hombres, sobre su rol como mamá. Estos temas son rápidamente disueltos por ella, tiene un discurso confuso y evasivo en relación a ellos. Siempre vuelve sobre cuestiones referidas a su trabajo y los hombres que allí conoce, discurso que sostiene desde cierta fascinación imaginaria, como una puesta en escena. Desde mi lugar trato de cortar ese despliegue para no quedar como espectadora del mismo e insisto preguntándole por su historia de relaciones. Cuenta que no tuvo una muy buena relación con su madre; que tiene un hermano; que los padres se separaron cuando ella tenía dos años “él se fue con otra” y que desde entonces no lo ve; que ellos vivían con sus abuelos maternos “yo era todo para mi abuelo y él todo para mi” este abuelo tuvo un accidente automovilístico cuando ella tenía 13 años y murió “cuando él se fue la mitad de mi vida se fue con él”. En los momentos en los que cuenta anécdotas de su infancia, o cuando le pregunto cómo fue que se vino a vivir a Argentina el discurso se torna muy confuso especialmente en los aspectos temporales, mezclando constantemente cuestiones del pasado con el presente. Le pregunto cómo es como mamá y contesta “¿yo? ¡Un desastre total!” luego de lo cual todo lo que cuenta lo hace en un tono defensivo, sobre todo se centra en que ella todo lo compra por cuatro “lo trato de hacer igual para todos”. Manifestando así que se rige por una noción de justicia igualitarista.

En estas entrevistas se indaga también sobre sus historias amorosas anteriores. Ella hace mención fundamentalmente a dos de ellas: el padre de Cintia a quien tuvo en Paraguay y con quien se separó ya que él la engañó con una prostituta; y otra pareja que tuvo de quien estuvo muy enamorada y que menciona como su gran amor: era extremadamente celoso con ella hasta el punto de encerrarla en la casa, además de ejercer violencia psicológica.

La quinta entrevista que mantenemos la comienza diciendo que “no trabajo más”. Por otro lado su ex pareja volvió a instalarse en el local. Dice “es como que me tocó mi talón de Aquiles. Nunca se tendría que haber metido con ella… porque en la calle hay muchas prostitutas”.

Si bien en esta entrevista todavía mantiene el despliegue en relación a su trabajo, se presenta el primer comentario que da cuenta de que no está cómoda con lo que está haciendo “yo no me animo a acostarme con cualquiera… me da asquito”. Se trabaja en esta sesión en relación a sus elecciones de pareja: el padre de Cintia, su gran amor, el padre de sus hijos menores: todos la han maltratado. Ella sigue viendo al vecino a quien ha apodado “la Plaga”, dice que él le dijo “yo te tengo confianza” y que eso le gustó. Él compró muchas cosas para sus hijos en el inicio de clases, “le saco lo que quiero”. En esta entrevista me cuenta que en realidad ella se vino a vivir a Argentina cuando Cintia tenía 3 años y que no la trajo con ella, en principio se vino sola con la idea de instalarse e irla a buscar. Rápidamente se junta con quien luego será el padre de sus hijos menores y “se nos vino la noche, inundaciones, la muerte de mi suegra, pérdidas de trabajo”. Recién cuando Cintia tenía 10 años la trae a vivir con ella al país. Hacia el final de la entrevista se pregunta “porqué mi hija no me dijo nada”.

En la entrevista siguiente se produce un quiebre en relación a todo lo que hasta este punto sucedió. Cuenta que si bien dejó de trabajar en los boliches, lo que está haciendo es ir los fines de semana a trabajar a campos de la periferia de la ciudad y ciudades vecinas. El último fin de semana fue sola a trabajar y comenta que en un momento se sentó en un rincón y pensaba: si pasa tal cosa salgo corriendo por ahí, si pasa tal otra me escapo por allá. Le marco que sintió miedo y las intervenciones se dirigieron fundamentalmente a su autocuidado. Cuenta que el domingo, cuando volvía de trabajar de un campo se largó a llorar en el colectivo “pensaba todo lo que estudié, que nunca faltaba un día a la escuela… todo para terminar como prostituta”. Intervengo en el sentido de que si volvió llorando es por algo y que a lo mejor puede armar otro proyecto.

Graciela llora durante toda la entrevista posterior, está muy angustiada dice que “nadie hace nada”, “yo ya estoy cansada”, “no doy más”, dice que ella ya hizo de todo, que “trabajo de algo que no le gusta… me ensucié”. Comenta que se compró un arma, intervengo diciéndole que ella es lo único que tienen sus hijos. En un momento dice que ella está llenando de odio a sus hijos en contra de su padre y que a veces “me agarra odio con Cintia porque no entiendo por qué me hizo eso”, también dice no entender “por qué fue que Cintia hizo eso a pesar de todo lo que ella le ha hablado y a pesar de qué podía ver como él la maltrataba a mi”. Le explico nuevamente que Cintia no le hizo eso a ella, que a Cintia se lo hicieron, que es muy importante que no deje de señalar esto con la niña, que está mal lo que le hicieron. Vivimos en un permanente estado de excepción diría Agamben, en un estado de crisis y anomia constante que afecta los modos en los que los padres se posicionan como garantes frente a sus hijos, y “cuando desfallece la ley, no hay garantías ni para el sujeto ni para las instituciones. Hay desamparo, resentimiento, violencia” (Gerez Ambertín, 2004). He aquí la razón por la que insisto, como todas las entrevistas, no solo en que demande de la ley jurídica una sanción, sino también para que ella como garante de la Ley pueda sancionar lo acontecido.

Lo antedicho daría cuenta de alguna manera de que Graciela se ubica en un plano de igualdad con su hija “por qué me hizo eso a mi”. Por otro lado, al iniciar una de las entrevistas hizo mención risueñamente a que se reían con la hija acerca de cuál de sus psicólogas era más linda. Este es un simple ejemplo, pero que nos sirve porque da cuenta de la competencia con su hija y me conduce a pensar en una relación especular en la cual madre e hija quedarían en un plano de igualdad. Esta paridad produce un desdibujamiento de los roles y de las funciones que éstos conllevan. Igualmente, la confusión temporal anteriormente mencionada en relación a cuando se le pregunta por la infancia me llevan a hipotetizar hasta qué punto ella se ubica allí en la infancia, y por lo tanto allí donde queda en pie de igualdad con la hija. Esta confusión temporal podría deberse a una inmadurez del yo. Asimismo, me parece importante destacar que utilizó la palabra odio, P. Assoun realiza un breve desarrollo acerca del odio que nos puede servir, dice “Odio y vergüenza constituyen dos destinos de la herida narcisista”

La semana siguiente Graciela se presenta menos angustiada “que va a hacer… tengo que seguir”; y en la última entrevista que tuvimos me cuenta que fue a la fiscalía para que saquen a su ex pareja del local. En este último encuentro me dice que “no me gusta la mujer en la que me convertí”, dice que ya nada a no ser sus hijos le importa, que los hombres son todos objetos para ella, que les saca lo que quiere y que se divierte cuando los hace sufrir. Hace unos días un hombre que ve seguido “me dijo te quiero… fue lo peor que me pudo haber dicho… ¡me dio asco!”. Sostiene que nunca más va a poder sentir nada por nadie. Le señalo que ella siempre eligió hombres que la maltrataron y que ahora pasó a hacerlo ella, y que podemos trabajar para que pueda elegir un hombre que la quiera y la cuide y a quien ella no trate como un objeto; es decir, intento que se implique como sujeto lo cual la pueda conducir por los caminos de la responsabilización subjetiva.

Graciela oscila entre una posición pasiva en la cual se ofrece como objeto para que el otro se satisfaga, y la asunción activa de ese mismo lugar haciendo del otro un mero objeto. En su historia relacional con los hombres siempre ha quedado – hasta ahora- puesta en el lugar del objeto al que se le puede hacer lo que sea. Ahora, si bien dice no gustarle este nuevo lugar, lo asume de forma activa. Me pregunto que factores pueden haber contribuido en los momentos constitutivos para que se ubique en sus elecciones adoptando posturas extremas, podríamos suponer alguna falla en momentos estructurales en relación a su posterior posicionamiento subjetivo. Entonces, cobra especial relevancia lo que dijera en relación a su abuelo: “yo era todo para mi abuelo y él todo para mi (…) cuando él se fue la mitad de mi vida se fue con él”, me pregunto de qué mitad de su vida habla aquí.

Podríamos pensar también qué la lleva a ejercer la prostitución, si bien ella ya se posicionaba como objeto en sus relaciones, dice no haber amado al padre de sus tres últimos hijos, ni gustarle el hombre que ve ahora, ¿no hay allí un goce?. Siguiendo el análisis que hace M. Gerez Ambertín de la culpa y sus tres registros, no es acaso el registro muda de la misma, esa “voracidad superyoica de goce”, que se ubica en la intersección de lo real con lo imaginario la que nos impulsa hacia ciertas manifestaciones. Se trata de una coacción o compulsión a la repetición, lo que Lacan tomando a Aristóteles menciona como Tyché… en tanto que la compulsión a la repetición supone ese encuentro con lo real, ese imposible de atrapar en el orden significante. Esta imposibilidad de significar la deja a merced de la pulsión de muerte con el riesgo psíquico que ello implica. Creo que podríamos pensar desde éste lugar este impulso hacia la pulsión de muerte que presenta la paciente, que manifiesta por ejemplo en la exposición que realiza al ponerse en situaciones de riesgo tales como ir sola a trabajar a campos en los que nadie sabe que está ahí, y fundamentalmente en las elecciones de objeto que realiza.

Podría pensarse que Graciela se esta ubicando como sujeto perjudicado, de alguna manera la lógica que la guía es que, como me han hecho daño, ahora puedo hacer yo daño a los demás. Pero hay un punto en que esa lógica no le agrada, y entonces queda abierto el camino para transformar la pregunta de Mignon “¿a ti, qué te han hecho…?” al espacio de la verdadera pregunta que propone Freud “¿qué vas a hacer, tú, con lo que te han hecho?”. Es justamente este punto el que puede actuar como articulador de cambios posibles, sólo desde la responsabilización subjetiva es que podemos vislumbrar un viraje, un posicionamiento diferente.


Bibliografía

§ Agamben, G. (2005) Estado de excepción. Adriana Hidalgo editora.

§ Assoun, P. (1999) El Prejuicio y el Ideal. Hacia una clínica social del trauma. Ed. Nueva Visión. Buenos Aires.

§ Lacan, J. (1964) El Seminario XI Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis.

§ Lacan, J. (1977) El estadio del espejo como formador de la función del Yo (je), tal como se nos revela en la experiencia psicoanalítica. En: Escritos I. México: Siglo XXI.

§ Masotta, O. (1991) Lecturas del Psicoanálisis Freud, Lacan. Ed. Paidós Psicología Profunda.5ta reimpresión. Argentina.

§ Milmaniene, J. E. (2005). EL tiempo del sujeto. Ed. Biblos. Buenos Aires.

§ Gerez Ambertín, M. (1993) Las voces del superyó: en la clínica psicoanalítica y en el malestar en la cultura. Buenos Aires: Manantial.

§ Gerez Ambertín, M. (2004) (Comp.) Culpa, responsabilidad y castigo en el discurso jurídico y psicoanalítico. Buenso Aires: Letra viva.

§ Gerez Ambertín, M. (2008) Entre Deudas y Culpas: Sacrificios. Crítica a la razón sacrificial. Buenso Aires: Letra viva.

miércoles, 26 de mayo de 2010

2da. Jornada Intersectorial de Salud Mental

“Debates y propuestas de la Salud Mental en torno a los malestares de la época. Hacia la desmedicalización de la cultura.”

Mar del Plata 19 y 20 de agosto de 2010

Organiza: Red de Salud Mental Gral. Pueyrredón. Facultad de Psicología

Destinatarios: profesionales, operadores y estudiantes relacionados al campo de la Salud Mental.

Arancel: profesionales: $ 40. Estudiantes, operadores: $ 20

OBJETIVOS GENERALES:

- Promover la construcción de Políticas públicas en salud Mental

- Revisar las prácticas en Salud Mental en función de las nuevas demandas

- Revalorizar el accionar de los trabajadores de Salud Mental

OBJETIVOS ESPECIFICOS:

- Promover el diseño de dispositivos de abordajes alternativos a la medicalización.

- Conocer y difundir experiencias innovadoras que se desarrollan en el campo de la Salud Mental.

EJES TEMATICOS:

Cultura, lazo social y Salud Mental

Políticas públicas en Salud mental

SM en la franja infanto juvenil

Dispositivos alternativos de abordajes.

Adultos mayores y poblaciones minoritarias

Epidemiología y Salud Mental

Panelistas invitados: Lic. Silvia Duschatsky - Lic. Beatríz Janin - Mca. Psc. Analía Cacciari - Mg. Arturo Frydman - Dr. Gustavo Parra.

Condiciones para la presentación de trabajos libres o poster:

a) Trabajos libres: en hoja A4, fuente Arial 11. Extensión: no más de 5 carillas (10 minutos de exposición).

b) Posters: 70 cm. De ancho por 100 cm. de alto.

Fechas de entregas

Resumen (no más de 200 palabras) hasta el 25 de junio

Trabajo libre o poster: hasta el 30 de julio

Informe e inscripción: redsaludmentalmdp@yahoo.com.ar

Tel: 4990363/4991104

COMISION CIENTIFICA:

Lic. Nada Taucar

Lic. Rita Fidalgo

Lic. Hugo Martinez

Lic. Isabel Giles

jueves, 13 de mayo de 2010

PANEL BULLYING

Colegio de Psicólogos Distrito X
Comisión de Adolescencia
BULLYING
Un fenómeno actual en la adolescencia
Sábado 12 de junio de 2010 - 14 hs


PANEL
Lic. Patricia VISIR
Lic. en Psicología Presidente de ASAPMI – Profesora de la UBA – Vicepresidente de Cifamilia – Capacitadora en el tema de bullying

Lic. Nancy DI VIRGILIO
Lic. en Psicología Docente de la Facultad de Psicología de la UNMDP – Miembro del Proyecto de Investigación: Identificación de modalidades de bullying y sus efectos en la subjetividad del niño y el adolescente agredidos

Preinscripción hasta 07/06/10: Colegio de Psicólogos Distrito X /474-0110/ colpsicdx@infovia.com.ar
Destinatarios: Psicólogos – Asistentes Sociales – Docentes – Psicopedagogos – Estudiantes
Aranceles:
Matriculados gratis
Profesionales $30.-
Docentes $20.-
Estudiantes $10.-

Lugar:COLEGIO DE MARTILLEROS - BOLÍVAR 2958

AL PREINSCRIBIRSE SE LES SOLICTA ASUMAN EL COMPROMISO DE ASISTIR YA QUE EL CUPO ES LIMITADO

Se entregarán certificados

martes, 20 de abril de 2010

III JORNADAS DE SALUD PÚBLICA MATERNO INFANTIL

Las III Jornadas de Salud Pública materno Infantil, “Interdisciplina en el Proceso Salud- Enfermedad- Atención”, tendrán lugar los días 23 y 24 de Septiembre de 2010.

Están destinadas a Profesionales de la Salud, Justicia, Educación, Promotores de Salud, Acompañantes Terapéuticos y estudiantes de las carreras afines, de Mar del Plata, Región Sanitaria VIII, Provincia de Bs.As y resto del país.

Los ejes temáticos son:
Es posible la interdisciplina?
Experiencia de abordaje en equipo.
Niñez y Adolescencia
Alcances y limitaciones del actual Sistema de Protección.
Alternativas de abordaje en enfermedades crónicas. Transición al hospital de adultos.
Violencia:
Violencia Familiar,
Maltrato Infantil,
Abuso Sexual,
Maltrato institucional.
Salud y Embarazo.
Diferentes abordajes de la Salud Pública.

La modalidad de la misma será de ponencias a cargo de profesionales calificados en la temática, también trabajos científicos y póster interdisciplinarios.

En una posterior comunicación se notificará sobre condiciones de trabajo y la fecha de presentación, lugar de inscripción y otros datos.

INFORMES:
HIEMI:
Servicio Social, Salud Mental, Pediatría, Obstetricia, Enfermería y Docencia.
Teléfonos: 0223- 4991104.
Fax: 0223-4936352.
Mail: IIIJornadas.SaludPublica.hiemi@hotmail.com

martes, 13 de abril de 2010

V Jornadas Marplatenses y III Regionales de Extensión Universitaria

Fecha: 15 y 16 de abril de 2010
Lugar: Centro de Arte MDQ Roxy - Radio City – Melany (San Luis 1752)

Las Jornadas se componen de Ejes Temáticos y Foros, espacios de encuentro, reflexión colectiva e intercambio respecto de las diversas experiencias y expectativas académicas en torno a la Extensión Universitaria.
En los Ejes Temáticos la dinámica consistirá en la presentación de proyectos de extensión vigentes que se desarrollan en cada una de las Universidades Nacionales participantes. El objetivo general es favorecer el conocimiento recíproco de las prácticas extensionistas y motivar una mayor articulación entre las mismas.

1. Salud Colectiva y Salud Mental
2. Arte, Comunicación y Diseño
3. Desarrollo Socio-Productivo y Economía Social
4. Educación
5. Desarrollo Urbano y Vivienda
6. Medio Ambiente


Por su parte, los Foros constituyen instancias de exposición por parte de referentes y de debate con el público asistente, con la finalidad de promover un tratamiento enriquecedor en la conceptualización y operatividad de distintas áreas temáticas.


PROGRAMA


JUEVES 15

8:00 hs: Acreditación
9:00 hs: Acto de Apertura – Palabras de:
 Lic. Francisco Morea – Rector UNMDP
 Cdor. Gustavo Pulti – Intendente Partido de Gral. Pueyrredón
 Baldomero Alvarez de Olivera - Ministro de Desarrollo Social de la Provincia
 Prof. Alberto Estanislao Sileoni - Ministerio de Educación
 Prof. Liliana DEMAIO – Rectora IUNA – Presidente Comisión de Extensión – CIN
 Lic. Daniel López – Ministerio de Educación
10:30 hs: Pausa – Café
11:00 hs: Ejes Temáticos
13:00 hs: Almuerzo
15:00 hs: Ejes Temáticos
17:00 hs: Pausa – Café
17:30 hs: Foro:
7. Vinculación Académica – Extensión – Investigación
- Lic. Néstor Cecchi – Secretario Académico – UNMDP
- Dra. Liliana Herrera Albrieu– Área de Extensión Universitaria – Programa de Promoción de la Universidad Argentina – SPU
- Lic. Daniel López – Ministerio de Educación
8. Derechos Humanos
 Lic. Fabricio Oyarbide – Secretario de Extensión Universitaria - UNMDP
 Dra. Emilce Moler – Comisión Provincial por la Memoria
 Alejandro Mosquera – Comisión Provincial por la Memoria
 Dr. Eduardo Luis Duhalde – Secretario de Derechos Humanos – Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos de Nación
19:30 hs: Actividad Cultural

VIERNES 16

9:00 hs: Foro:
9. Voluntariados – PVU
 Lic. María Marta Guerra – Responsable Programa Voluntariado Social Universitario – UNMDP
 Fernando Grosso - Programa de Voluntariado Universitario – Ministerio de Educación de Nación
 Valeria Di Crocce - Programa de Voluntariado Universitario – Ministerio de Educación de Nación
10. Transferencia
 Dr. Guillermo Lombera – Secretario de Ciencia y Tecnología – UNMDP
 Dra. Ana Malizia – Subsecretaria de Transferencia – UNMDP
 Ing. Agr. Julio Elverdin – I.N.T.A.
 Ing. Vera Raiter – I.N.T.I.
 Ing. Agr. Carlos Gerónimo GIANELLA – Presidente - C.I.C.
11:00 hs: Pausa – Café
11:30 hs: Ejes Temáticos
13:00 hs: Almuerzo
15:00 hs: Foro
11. Desarrollo Local y Regional
 Lic. Adrián Giudice – Subsecretario de Extensión Universitaria – UNMDP
 Ing. Horacio TETTAMANTI - Secretario Producción – MGP
 Dr. Jorge BRAGULAT – Programa de Promoción de la Universidad Argentina de la SPU
 Baldomero Alvarez de Olivera - Ministro de Desarrollo Social de la Provincia
16:30 hs: Pausa – Café
17:00 hs: Panel sobre Extensión Universitaria
• Fabricio Oyarbide – Secretario de Extensión Universitaria - UNMDP
• Juan Pablo Itoiz – Secretario de Extensión Universitaria - UNNOBA
• Ing. Gustavo Menendez – Coordinador - REXUNI
• Prof. Liliana DEMAIO – Rectora IUNA –Presidente Comisión de Extensión - CIN
18:30 hs: Acto de Clausura y Entrega de Certificados


EJES TEMATICOS

Salud Colectiva y Salud Mental
Lugar: Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos (Hipólito Yrigoyen 1549)

• Adolescencia es salud -Dir Lic Graciela Llarull
• Alfabetización científica en radiobiología - Alba Güerci
• “ArtQuimia: Dispositivo de construcción de redes sociales desde el ámbito cultural, destinado a personas con sufrimiento mental.” - Lic. Basualdo, Sonia Malva
• Centro de Extensión de Atención a la Comunidad: Un proyecto de la Facultad de Psicología de la UNLP - Psic. Pérez Edith
• Comunicación y salud. Experiencia de voluntariado con jóvenes en tratamiento de adicciones - Néstor Daniel González
• Diagnóstico, educación y prevención de las parasitosis infantiles - Leonora Kozubsky - María Elena Costas
• Educar para la salud: Jóvenes y sexualidad - Roche Ana María
• El desafío de prevenir la violencia familiar - Psic. RADOSINSKY, Alicia Rosa
• Fluoruros aplicados como cariostáticos por prácticas de alumnos de la folp Educar en salud con perfil social - Dra Medina María Mercedes
• Fortalecimiento Comunitario para el Abordaje de Problemáticas Psicosociales para Adolescentes y Jóvenes del Sudoeste Marplatense. II Etapa - Lic. Juan José Lakonich
• Integración regional y desarrollo comunitario: Taller de preparaciones magistrales y oficiales - Farm. Arturo Hoya
• La Salud Como derecho: Un abordaje comunitario - Pérez, Silvia
• La salud está en nuestras manos. Alfabetización en salud en la escuela - Mg. Stella Ramírez
• Los centros de salud como sede del proceso de enseñanza-aprendizaje de los alumnos de medicina: Programa de Mejora de la Calidad - Arrondo F.
• Odontología y sociedad. Formosa, poblaciones en riesgo. Cariostáticos una solución PRAT - Dra Medina María Mercedes
• PRAT Aplicados en Programas de salud con Cariostáticos en población escolar - Dra Medina María Mercedes
• Prevención y Seguimiento de Enfermedades Cardiovasculares - Clara, Fernando
• Proyecto de Salud Bucal Chilecito La Rioja cariostaticos aplicados en población escolar - Dra Medina María Mercedes
• Prueba piloto de promoción, prevención y gestión en salud en la población materno-infantil en situación de riesgo crítico del Barrio Monte Terrabusi - Garcia Cein, Emma
• Reciclando la salud bucal - Dra Medina María Mercedes
• Salud, creatividad y movimiento: el Taller de Parkinson - Silvana Pujol
• Santiago del Estero, Académicos Solidarios I - Dra Medina María Mercedes
• Vamos por más: Integración con Juventudes en Comunidades Vulnerables - Araceli Cora García

Arte, Comunicación y Diseño
Lugar: Ingreso pullman sala Roxy (1º subsuelo)

• Desarrollo social y adultos mayores. Envejecer activamente a través de prácticas expresivas, productivas y creativas - Dra. Gabriela Tineo
• “Comunicación Participativa: Herramientas de Inclusión y Promoción Humana como intervención comunitaria” - Lic. en TO María Laura Tejón
• Los medios en manos de los chicos - Lic. Jorge Castro
• Taller de comunicación y producción radial en la Unidad Penitenciaria Nº 4 de la Provincia de Buenos Aires (Cárcel de Villa Floresta) - Eberle, Adriana
• Teatro y Ciencia - Sánchez, O.
• “Integración. Producción de Juventudes en Comunidades Vulnerables. Barrios Belgrano Autódromo y Don Emilio.” - Araceli Cora García

Desarrollo Socio-Productivo y Economía Social
Lugar: Sala Radio City(1º piso)

• “Apoyo a la sustentabilidad de micro emprendimientos de Mujeres Jefas de Hogar” - Mg. Fabián Andrés Delicio
• “Desarrollo socio-comunitario en el marco de la Agroecología y la Economía Social” - Ing Agr. Virginia Esther Hamdan
• Acompañando emprendedores, ejes del desarrollo local” (Tercera Etapa) - María Eugenia Líbera
• Área de vinculación comunitaria en Ciencias Sociales
• Banco Social y Feria Manos de la Tierra: Fortalecimiento de una propuesta integral y sustentable para la agricultura familiar del Gran La Plata - Ing. Agr. (Ms Sc) Ramón Cieza
• Derecho a la identidad: La diferencia entre tener un derecho y poder ejercerlo - Ángela Oyhandy
• El valor estratégico del turismo en el desarrollo local en un espacio con dominante natural: Reserva de Biosfera Parque Costero del Sur - Rossi, Elisabet
• Fortalecimiento de las instituciones culturales y deportivas de La Plata. Aprendiendo a gestionar la particularidad: La vuelta al Barrio - Lic. Laura Tavella
• Hacia un desarrollo sustentable, equitativo y eficiente del sector textil. Inclusión socia - Lic. Laura Tavella
• Herramientas para la promoción de emprendimientos productivos. Cultura del proyecto y la producción - Gadler Barioni, Silvio Victor José
• Laboratorio de construcción, capacitación y producción familiar en barrios con grupos sociales indigentes en riesgo crítico con alta población de niños. Etapa IV - Cacopardo, Fernando
• La UNICEN en su vinculación con el sector socio-productivo, cultural nacional, regional e internacional - UNCPBA/SPU
• Lo que vos tirás, para mí es trabajo - Barrio El Retiro - José A. Rapallini
• Los Programas Institucionales de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires – UNCPBA
• Mujeres rurales y ciudadanía: formación en liderazgo, construcción de redes y cooperación (Ayacucho, Balcarce, González Cháves, Juárez, Lobería, Necochea, San Cayetano, Tandil y Tres Arroyos) - PRODESP (Programa de Estudios Políticos, Dto. Política y Gestión) y Secretaría de Extensión. Facultad de Ciencias Humanas, UNICEN
• Observatorio permanente de organizaciones de la sociedad civil. El Papel de la Mujer - Eva Sarka
• Organizaciones Publicas No Estatales Productoras de Servicios Sociales de la Región Centro de la Provincia de Buenos Aires. Análisis de Potencialidades y Limitaciones en la Producción de Servicios y Defensa de la Ciudadanía - Araya, José María
• Producción integral y participativa del hábitat social en asentamientos humanos periféricos de la ciudad de La Plata (Barrio San Carlos de Villa Elvira y El Mercadito) - Arq. Luciana Marsili
• Promoviendo el trabajo cooperativo para la producción social del hábitat en el barrio La Herradura - María Eugenia Líbera
• Proyecto Extensión SPU 2008: Consejo de Secretarios de Extensión – UNCPBA
• Red de organizaciones de la economía social. Intercambio y fortalecimiento de emprendedores de la economía social y solidaria - Lic. Claudia Beatriz Tello
• Tendiendo Puentes - Lic. Guillermo O. Quinteros

Educación
Lugar: Sala Melany

• Arboretum en la EEA INTA Pergamino - Ing. Agr. María Lusardi
• “Arqueología, educación y museos: ámbitos de encuentro entre investigadores y comunidades locales”, Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata. - Patricia Madrid
• Asesoramiento Institucional en Gestión Escolar a instituciones educativas públicas del sistema educativo bonaerense - Renata Giovine (coord.)
• Capacitación de manipuladores y productores de alimentos en Seguridad Alimentaria - Méd. Vet. Pedro A. Zeinsteger
• Caperucita y el Lobo en el ciberespacio. Concientización en seguridad informática para jóvenes y tercera edad - Mg. Lia Molinari
• Conozcamos las plantas que nos rodean: Detección de plantas tóxicas en jardines de infantes del Partido de Bahía Blanca - Dra. Viviana N. Cambi
• Construcción de derechos en contextos de vulnerabilidad social - Profesor Abogado Alejandro Raúl Casas
• Consultores jurídicos gratuitos - Abog. Verónica Mas
• Convoc-arte: Formación de Voluntariado - Daniel Guzmán
• Creación de Espacios educativos como modos de prevención (Fac de Humanidades y Cs.Médicas) - Med. Esp Sandra Susacasa.
• Creación y Puesta en marcha de la Incubadora de Proyectos de la Universidad Provincial del Sudoeste - Dr. Savoretti, Andrea
• Desarrollo y Difusión de un Programa Informático para la Evaluación del Desempeño de
Sembradoras - Telmo Palancar
• Educación Forestal y Participación Ciudadana - Prof. Lic. Stella Maris Rivera
• Educación para el uso responsable de plantas medicinales - Dra. María Adelaida Rosella
• Educación popular en organizaciones sociales con base territorial: Sujetos, saberes y experiencias educacionales - Dra. Figari, Claudia
• Educación y multiculturalidad - Beatriz Gualdieri (coordinadora)
• Educación y promoción de derechos en los barrios la Unión y el Mercadito - Amalia EGUIA
• Filosofía con niños, niñas y adolescentes: Hacia la configuración de nuevas prácticas de articulación en el espacio público educativo - Laura Morales
• Integración. Producción de Juventudes en Comunidades Vulnerables. Barrios Belgrano Autódromo y Don Emilio. Voluntariado - Araceli Cora García
• La enseñanza del inglés en el primer ciclo de la escuela primaria - Silvana Barboni
• La huerta y el comedor escolar como espacios de aprendizajes para la promoción de hábitos alimentarios y estilos de vida saludable - Borrás, Graciela
• Laboratorios con ciencia - Godoy AV
• Las normativas legales como herramientas educativas - Dr. Alejandro Palacios
• Multilingüismo en la escuela intercultural (2008) y Multilingüismo e Interculturalidad en Educación (2009) - Prof. Gladys Lopreto
• Política y acción colectiva: formas de participación en la escuela - Canedo, Mariana
• Promoción de los derechos en la UNS - Lic. Claudia Legnini
• Propuestas para la socialización de conocimientos sobre pueblos originarios americanos y comunidades rurales en el Partido de General Pueyrredón. - Federico Valverde
• Protagonistas: jóvenes, docentes y escuelas por la construcción colectiva del desarrollo de comunitario - Lic. Néstor Horacio Cecchi
• Proyecto de prevención de accidentes domésticos y, peridomésticos en niños menores de 5 años y de tránsito en adolescentes de 11 a 18 años, en la ciudad de Berisso - Rossi Casé Lilian
• Proyecto formativo para los estudiantes de las carreras Prof. y Lic. en Ciencias de la Educación - Mg. María Laura Galaburri
• Punto y coma: si se escondió, te embroma: Los jóvenes reflexionan sobre violencia de género - Prof. María del Carmen Cosentino
• Reduciendo la brecha digital en niños y jóvenes - Javier Díaz
• Saber la ley – proceder - Zeballos Bilbao, Rodrigo
• Software Libre en las escuelas: conociendo alternativas para poder elegir - Javier Díaz
• Tutores voluntarios para lectores esforzados - Prof. Celia Agudo de Córsico
• Unitec Late - Mgr. Ing. María Cristina Cordero
• Utilidad de la producción de conocimiento en la Universidad Pública y Estatal - Taborga, Ana María
• Vacaciones con los Dinosaurios. Programa de Extensión Educativa: Pequeños Artesanos - Banchio, Noelia

Desarrollo Urbano y Vivienda
Lugar: Ingreso Radio City(1ºpiso)

• Discapacidad, rehabilitación y medio construido. Propuesta interdisciplinaria de formación práctica Etapa I y II - Demarchi , Nora
• “Accesibilidad en edificios institucionales de uso público. Elaboración de una guía mapa de Accesibilidad.” - Arq. Juan Manuel Escudero
• “Construyendo accesibilidad en los Hospitales” - Sandra Lea Katz
• “Gestión para la Recuperación Patrimonial de las Estaciones Ferroviarias de General Pueyrredón” - Arq. Ana I. Zagorodny
• Infraestructura y Políticas Sociales en Mar del Plata, 1890/1950 - Arq. Guillermo Eciolaza

Medio Ambiente
• La agenda 21 local en el ámbito escolar: La auditoría ambiental como instrumento educativo - Mariana Alicia Camino
• “Bioensayos de ecotoxicidad con organismos nativos como herramienta de evaluación de contaminación de agua y sedimentos de ambientes acuáticos en la región pampeana (Exp-Luj 0000902/08)” - Lucrecia Ferrari
• “Cestos comunitarios para la recolección de la basura en el barrio Los Laureles (Luján).” - Claudia Feijoó
• Banco de semillas y jardín botánico de plantas nativas para la conservación de los ecosistemas regionales - Carlos B. Villamil
• Eliminación de arsénico en aguas subterráneas para consumo. Atención del problema social desde las ciencias exactas y naturales - Irma Lía Botto
• Los niños, sus relaciones y vinculación con el hábitat - Burmester, Mónica Adela
• Ordenamiento ambiental y gestión del territorio: renovación de estrategias para la configuración de Áreas Protegidas en el Partido de Luján, Prov. de Bs. As. (II Etapa) - Lic. Claudio Tuis
• Edu-RAEE: Acercarse ecológicamente a la era digital (Cómo reducir la brecha digital colaborando con el medio ambiente) - Francisco Javier Díaz
• Estrategias de Promoción de la Salud y el Ambiente en Comunidades Rurales Toba-Qom de Pampa del Indio, provincia de Chaco” - Prof. Dr. Horacio Oscar Pracilio

miércoles, 17 de marzo de 2010

IIIº CONGRESO PROVINCIAL DE ATENCION PRIMARIA DE LA SALUD

IIIº CONGRESO PROVINCIAL DE ATENCION PRIMARIA DE LA SALUD
Iº ENCUENTRO NACIONAL
“APS y Equidad Social en el Bicentenario”
28, 29 Y 30 de ABRIL de 2010 Mar del Plata. Hotel Provincial

www.ms.gba.gov.ar/cosapro/formulario.html
Capítulo de Salud Mental en APS – APSA

XXVI Congreso de APSA en Mar del Plata

21 y 24 de abril de 2010

Salud Mental en Atención Primaria de la Salud.

Problemas prevalentes, interfase, y tratamientos basados en la evidencia

El curso es arancelado

Becas
APSA, para facilitar la participación de los médicos generalistas y de familia en el curso otorgará becas a todos los que trabajen en APS en el sistema publico (excluye a los médicos que trabajan exclusivamente en privado). Esta beca incluye la inscripción en el congreso (pudiendo participar del resto del congreso) y el curso. La condición obligatoria es la inscripción previa con anticipación en la dirección del secretario del curso lista.sm.aps@gmail.com <mailto:lista.sm.aps@gmail.com> antes del 24 de marzo de 2010

se solicita a los que ya se inscribieron que confirmen su participación.



miércoles, 17 de febrero de 2010

UN NIÑO SIN PALABRA. Psicoanálisis en Atención Primaria de la Salud

MARA LIZ SERRA / EDUARDO SANTIAGO SULLIVAN


INTRODUCCIÓN


Nos mueve el deseo de compartir con ustedes nuestra experiencia en la práctica clínica de niños pequeños. La misma se realiza en el contexto de la Atención Primaria de la Salud en un Sub. Centro de Salud Municipal, radicado en una zona suburbana de la ciudad de Mar del Plata. Nuestra intención es acercar algunas reflexiones sobre la posible intervención de un equipo de salud mental, en este caso integrado por una T.O y dos psicólogos, como consecuencia de la detección precoz de dificultades del desarrollo de niños entre 1 y 5 años.

Haremos referencia a un caso clínico de un paciente del servicio, el cual se encuentra actualmente en tratamiento, tomando como eje conceptual los desarrollos teóricos sobre la estructuración del psiquismo infantil y lo que la clínica psicoanalítica nos enseña, como decía Freud en su carácter soberano, a través de nuestros pacientes.

DESARROLLO

Se trata de un pequeño que en la actualidad cuenta con 4 años. Llega a la consulta a partir de un control de salud en la sala, que se realiza en Terapia Ocupacional. Para ese entonces, teniendo nueve meses de vida, no aparece nada significativo en la conducta del bebé, sin embargo la Terapista Ocupacional registra en la Historia Clínica: “actitud temerosa de la mamá referente a los desplazamientos del niño”. Es en el control de los quince meses cuando emergen los primeros indicios de dificultades. Ante una prueba en la que tiene que invertir una botella plástica para extraer de ella una bolita, la botella se sacude, oscila sobre la mesa y A se funde con el objeto, quedando su mirada capturada por el movimiento el que reproduce con su cuerpo. A partir de esto, la mamá comenta algunas estereotipias que el niño presenta en lo cotidiano: abrir y cerrar repetidamente una ventana, estar pendiente de algunos ruidos, etc...Ella pregunta: es una especie de autismo? Se lo cita para ser evaluado conjuntamente con psicología.

La infancia no supone una etapa cronológica de la vida. Para que ella exista es necesario una posición particular del Otro donde el “espacio lúdico se instale”. Supone que el “de jugando” como lugar de la constitución de la niñez, opere. Es un espacio que no está ni adentro ni afuera pero como tal, permite que los procesos de construcción psíquica se realicen. Estos momentos podrían operacionalizarse en dos tiempos: el de alineación y el de separación. En el primero se construyen las coordenadas para que el infant se haga de un cuerpo pulsional y de un yo.

La consecuencia cuando esto no se produce es la falla en la constitución de la imagen del cuerpo (a través de la relación especular con el otro) y en la constitución del yo. Esto correspondería al fracaso del tiempo de la “alienación” en la constitución del sujeto dejándolo sin imagen del cuerpo, haciendo problemática su vivencia de unidad. Esta ausencia de imagen del cuerpo tendrá al menos otra consecuencia: bloqueará la posibilidad de la construcción de un no yo, la posibilidad de libidinizar los objetos y por lo tanto de relacionarse con ellos.

La presencia-ausencia materna y la modalidad en que ella se presente, va a ser el eje de esta operación básica del ingreso en lo simbólico. “Prematuro como es el cachorro humano requiere la presencia real de un agente que lo reciba en un espacio virtual (el lugar de su falta), espacio en el cual ese infant se espeja (se imaginariza). Este espacio se cava en el agente materno en la medida en que existe en él una referencia a lo simbólico. Para ser más precisos, es necesario que ese agente esté capturado por la castración simbólica, inscripto metafóricamente en el Nombre del Padre. Solo así el hijo es objeto de deseo; y solo así entonces, la madre inscribe en su cuerpo las marcas de lo simbólico” Lacan lo dirá de la siguiente manera: “sólo en este caso lo que ella buscará en el niño no será una satisfacción al nivel de una erogeneidad corporal, [...] sino una relación que, constituyéndola como madre la reconozca a la vez como mujer de un padre.” A partir de este eje de presencia-ausencia materna, será ella misma, en tanto pueda sustraerse, ausentarse, la que permita la operación de la metáfora paterna, es decir que el niño no sea todo para ella y que le permita a su vez dirigir la mirada mas allá de él, por ejemplo al padre.

Volviendo al caso, podemos suponer ciertas fallas en la estructuración psíquica del niño, sustentado además en la pregunta que porta su madre. Nuestra primera hipótesis clínica es que existe una detención en el desarrollo, y por ello las acciones irán orientadas a interrogar las causas de la misma, apostando a que la detección precoz permita abrir un campo de intervenciones posibles.

Iniciamos las consultas con el niño la psicóloga y la terapista ocupacional (en presencia de la madre dado que el pequeño no ingresaba solo al consultorio), desarrollándose esta estrategia durante los primeros seis meses. En este período observamos que A se mantenía en silencio durante los encuentros, sólo emitía sonidos para llorisquear, o quejarse. Su exploración de los juguetes era silenciosa, no aparecía siquiera un silabeo. En una ocasión frente a sonidos de la calle dijo:

“MOTO, PAPA”. La madre que habla todo por el niño, nos explica que el padre viene en moto del trabajo y que A lo nombra al llegar. Refiere en esa ocasión que le llama la atención que aprende palabras pero que después las olvida (ejemplo gracias, dame). Advertimos que las adquisiciones o pautas de desarrollo aparecían pero lábiles, como si fuera un bosquejo de lo esperable. Por ejemplo, su respuesta ante el espejo no era de indiferencia, pero tampoco de júbilo: se miraba sonreía y se entregaba a otra actividad. En relación a los juguetes se aproximaba, los sacaba de la caja los manipulaba pero no había actividad lúdica. Se sumaba a escenas de juego que se le proponían: dar de comer a la muñeca, servir un té, pero lejos de constituir juego, se trataba de actividades que están del lado de la imitación, desplegaba una estereotipia con algunos juguetes, por ejemplo tapar y destapar la pava; en una ocasión se asustó cuando jugamos a que un pajarito piaba, se sorprendió y fue necesario explicarle que se trataba de un juego.

Durante estos tiempos del trabajo con el niño observamos, que el sentido unívoco otorgado por la madre a las manifestaciones de A, hacia imposible que él se iniciara en la palabra. Como dice Jerusalinki “lo que permite la ruptura de la continuidad entre la madre y el hijo es la intromisión de un discurso, que operando en la madre la castración simbólica, obliga a ambos a hacer referencia a un tercero”.

Durante las entrevistas mantenidas con la madre de A surgen elementos que fueron aportando datos sobre esta particular manera de relación: se trata de una mujer de 39 años que hace cinco formó pareja con el padre de A. Tiene una hija de 17 años de “su primer amor”, con quien sostuvo una relación hasta que la niña tenía 4 años, y a quien sólo olvidó cuando conoció al padre de A. Hasta ese momento vivía con su hija y su padre, en la casa paterna. Trabajaba en un instituto de repostería dando clases de decoración. Al poco tiempo de conocer al padre de A comienzan a convivir incorporándose éste al grupo familiar. Lo que rápidamente llama la atención en su discurso es que la llegada de la pareja a su vida constituyó un acontecimiento, es decir marcó un antes y un después.

Deja de trabajar poco antes de que nazca A y la situación económica se deteriora rápida y severamente, llegando al punto de faltar en ocasiones el alimento. Ella lo graficará con un “yo vivía de otro modo”. Relata una “crisis de pareja” que se inicia prácticamente en el nacimiento del niño y se sostiene, con episodios de violencia por parte del padre de A, pasando del amor sublime al odio incontenible, con conductas autoagresivas acusando luego: “mirá lo que me hiciste hacer”. Dirá Lacan que lo que el sádico busca es provocar la angustia en el otro para confirmar su amor. Suspendida en la inagotable tarea de responder esta demanda, dando su amor en grandes dosis de angustia, entrampada en la pregunta “¿qué le pasa?”, “¿cómo puede ser de un modo y enseguida de otro?”, la madre de A perdió el hilo de Ariadna en el laberinto de su propio deseo, congelando su vida en esta pregunta y suturando su angustia en un niño que no llega al estatuto de falo imaginario por ser velo del dolor. A venía a coagular la angustia materna siendo justamente por eso la dirección de la cura un esfuerzo por abrir una brecha que permita a la madre poner a jugar su deseo y al niño constituirse como tal, apuntando a instaurar algo de esta separación necesaria.

Luego de unos meses de este abordaje y ante la postura infranqueable de ambos al dispositivo, resolvimos que la madre de A tendría su psicoterapia con la psicóloga, mientras A continuaría con sesiones de terapia ocupacional incluyendo otro profesional psicólogo en los encuentros. Este es el dispositivo que se sostiene hasta la fecha.

En esta etapa del trabajo el niño responde al llamado cuando se lo nombra, dirigiendo la mirada pero siendo notable la ausencia de palabras o apareciendo muy escasamente, en cambio son frecuentes las ecolalias o murmullos, a partir de las intervenciones de la madre que no soporta “que no entendamos lo que A dice”. Asumimos que hay una intencionalidad de comunicar con estos gestos, por ejemplo cuando quiere un objeto ubicado lejos de su alcance, pero estas situaciones aparecen escasamente. La madre se muestra con una actitud explicativa, no pudiendo aceptar el sin sentido de lo que allí sucede. Habla todo el tiempo, irrumpiendo en el espacio de la sesión, suponiendo conductas o actitudes del niño y justificándolas de muy diversas maneras. Intervenimos intentando construir escenas de juego, a lo que responde con labilidad exigiendo mucho de los terapeutas para sostener un espacio diferenciado entre él y la madre. Los juegos de tirar objetos o hacer ruido suelen presentar aceptación y esboza sonrisas y disfrute. No así con juguetes más figurativos. En general, todo lo remite a ella y en ocasiones hace berrinches, como querer retirarse de sesión inmotivadamente a lo que la madre responde, sin poder poner límites ni frustrarlo. Durante mucho tiempo compartió la cama marital, situación que fue muy difícil de modificar por los adultos y que en teoría ahora no estaría ocurriendo. En ocasiones logramos que A ingresara solo al consultorio, pero se angustiaba al notar la ausencia de la madre no aceptando estas pautas a la sesión siguiente.

La monotonía en estas dificultades se extendió durante largos meses de trabajo y en ocasiones el desaliento nos embargaba por no percibir cambios en A, ni en su madre. Durante el desarrollo del tratamiento fue necesario comunicarle que la situación de A era de gravedad y que estaba seriamente comprometida su socialización y la posibilidad de que adquiriera la palabra. Nuestras indicaciones para que se instaure algún tipo de diferencia entre A y su madre eran acompañadas por comentarios de ella donde explicaba que le estaba enseñando las letras y los números afanándose en “reeducarlo”, al tiempo que advertíamos que ante la angustia materna el pequeño oficiaba de tapón y lo arrojaba aun mas hacia el cuerpo de la madre. En ocasiones se le sugirió incluirlo en alguna institución escolar para propiciar esta separación, haciendo de suplencia a la ausencia de corte, opción que la madre no podía enfrentar por diversas situaciones, pero que indudablemente tenían que ver con las particularidades de la posición del niño frente a ella. “cuando me angustio, me aferro a A y el me dice: no llora, mamá, no llora… y yo pienso que si no lo tuviera a él qué haría yo”.

Luego de dos años de trabajo A comienza la concurrencia al Jardín de Infantes tan esperado, tanto por la madre como por nosotros. Durante las semanas de adaptación la madre venía a comunicarnos, que la señorita le decía que se fuera a otro espacio y que ella lo espiaba por detrás de la puerta, que aprovechaba para entrar al aula por si necesitaba algo. Este fue el comienzo de una nueva etapa para A. En una de las tantas sesiones en que repetíamos la misma invitación a entrar solo a jugar, observamos que la madre se despide de él y le dice que lo vendrá a buscar mas tarde. Ante la sorpresa de todos ingresa solo y desde ese momento, nunca mas pedirá que la madre entre con él. Como una semilla a punto de expandir su simiente, A fecunda el espacio de sesión con el “de jugando”, poco a poco, se articulan palabras, aparecen las primeras demandas “¿me lo das?”, acepta ponerse un títere en la mano para hacerle la comidita al patito, hechos que en otro momento solían aterrorizarlo. Se mira en el espejo y recibe el halago ¡qué lindo nene! y responde con una sonrisa, o sube muchos soldaditos a un tractor y con voz impostada enuncia: “te voy a llevar a pasear”.

Por su parte, la madre retomó algunas actividades laborales. En su discurso se escuchan anhelos que van más allá de su hijo y de su pareja, habla de proyectos y logros, dice al pasar “mi marido con sus rayes como siempre, pero no me engancho”. Algo de un corte simbólico operó también allí dando lugar a que la vida transite, a que un matiz aparezca, ya no repite entrevista a entrevista un goce imposible de acotar.

El espacio institucional abrió la posibilidad de que fuera entregado a otros, y desencadenara la salida del goce incestuoso con la madre. El tratamiento permitió que eso se produjera y que la madre pudiera mirar para otro lado más que al niño, valiéndose como mujer para afrontar su angustia y desplegar la posibilidad de hallar un deseo que vaya más allá de él.

CONCLUSIONES

A modo de conclusión queríamos expresar la apuesta que como analistas renovamos cada día por la clínica psicoanalítica con niños. Estamos convencidos que este es un espacio de intervenciones posibles en el ámbito de la atención primaria de la salud donde la escucha analítica puede aportar sus particularidades. Consideramos que la detección precoz de trastornos del desarrollo en un psiquismo en construcción, abre la perspectiva de interrogar sobre los discursos de la familia, de la medicina o de la escuela y con ello la posibilidad de intervenir desde la no cristalización en un diagnóstico. El caso comentado en este trabajo puede ser un exponente paradigmático en donde una respuesta enunciada ante la pregunta materna (¿se trata de una especie de autismo?) no hubiera permitido la interrogación sobre ese discurso y el efecto habría sido el estancamiento en ese lugar asignado.

El niño del psicoanálisis está conformado por los discursos de todo aquello que lo rodea, el de sus padres, la escuela, el juez, etc. El analista será el encargado de escuchar y permitir que esos discursos se desplieguen, bajo premisa de la ley fundamental de la asociación libre, cargando sobre sí la posibilidad de ofrecerse como objeto para usar. Herramienta que nos permite, causar un deseo y con ello, la posibilidad de guiar una cura.

A se va tomado de la mano de su madre, se da vuelta y nos dice: “¡chau!”

Todos sabemos que ese, no es el mismo niño de antes.

BIBLIOGRAFÍA

BRAUNSTEIN, N: “Freudiano y Lacaniano”. Editorial Manantial. 1994

JERUSALINSKI, A: “Psicoanálisis del autismo” Editorial Nueva Visión.1997

MANNONI, M: “De un imposible al Otro”. Biblioteca Freudiana. Paidos. 1985

MATHELIN, C: “Clínica Psicoanalítica con niños. Uvas Verdes y Dentera”. Nueva Visión. 1995.

LACAN, J : Seminarios 9 y 10. Edición electrónica.